Gruñó de placer al sentir y una vez que se liberó un poco de tensión de su sexo, Mariasantosferrer se dio vuelta, se desabrochó los pantalones y los deslizó por sus piernas. Parado frente a su dueño, Mariasantosferrer extendió la mano para retirar el condón, pero se detuvo cuando el tipo aprovechó la oportunidad para quitárselo él mismo. Volvió a ponerse delante de ella, que ya estaba completamente desnuda, y empezó a lamer y chupar sus pezones de nuevo, mientras que esta vez dos dedos se abrían camino dentro de su coño mojado, lubricando lentamente su punto G. El tipo, como su amigo antes, tenía sus manos en sus caderas, cuando Mariasantosferrer la hizo mover, revelando su trasero, del cual se sacó los jeans, mostrándole al tipo su coño apretado y afeitado. La chica estaba apretada y caliente de haber sido follada antes, Mariasantosferrer se adelantó y los chicos se movieron para lamerla limpiamente y luego empezaron a lamerle el culo. Finalmente se sentó en el sofá de nuevo, Mariasantosferrer desenganchó sus jeans, sacó sus bragas, y finalmente se sentó a buscar su culo, mientras su amante y los otros dos tipos trabajaban gratis. Tenía unas tetas geniales, y había estado empapada toda la noche. Un momento, y la chica habría tenido su propio sabor, justo en la parte delantera de su cabeza. A partir de ahora, Mariasantosferrer debía tomar el control de su propio placer, y vivir de la manera que quisiera. .
