Deeadiamond debe estar tan caliente, porque ciertamente parecía que estabas caliente. Debo admitir que no tengo ni idea de lo que te hizo hacer, pero sabía que querías cogerme, así que empezaste a frotarte delante de mí. Pero mientras me la follaba, no dejaba de pensar en ti. Deeadiamond estaba hablando de ti, y yo seguí cogiendo con ella. Sé que era el verdadero amor el que hacía que ella te amara. Cuando me di cuenta de que estabas encima de mí, que no me iba a correr en su boca, que mi primer coño probablemente iba a ser con un extraño, supe que no podía correr con ella; Deeadiamond valió la pena la espera. Sabes que una vez que un hombre se coge a una chica así, nunca quiere parar. Incluso me inclinaste, torciste mis codos, besaste mi cuello como si fuera tu juguete sexual. No estabas mejorando mi parte favorita de ser mujer. La estabas empeorando. ¿Qué, no crees que eso fue lindo? Me di cuenta de que estaba siendo irracional. Si alguna vez lo hubieras intentado, te habrías dado cuenta de que no podía salir de eso. Fue horrible, y duró horas. Le dije que quería que parara...
